Carnaval de Notting Hill. La magia caribeña en Londres

Este artículo pertenece a la guía de Londres de Vivir Europa.

Londres es multiculturalidad, es acción, es música y color. Londres es una ciudad viva como pocas, por eso es en mi opinión la mejor ciudad de Europa y lo es más si cabe a finales de agosto, cuando el último lunes del mes se convierte en festivo (bank holiday) y durante dos días Notting Hill se vuelve la capital del Caribe. Con lluvia sí, pero aún así con temperatura ecuatorial gracias al Carnaval de Notting Hill.

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No te sientas mal si no habías oído hablar del que es el mayor carnaval de toda Europa y uno de los mayores del mundo, ni tampoco te sientas mal si pensabas que Notting Hill era sencillamente el barrio al que ir para echar la foto de turno enfrente de la puerta que Julia Roberts y Hugh Grant hicieron famosa hace unos años. Siéntete mal si vas a Londres a finales de agosto y no te reservas íntegros los dos días de Carnaval.

Desde 1965 la población caribeña de Londres convierte la morriña en trajes de colores, música que hace contraer tus músculos en un baile casi involuntario, olor a carne asada y ríos de Red Stripe, la cerveza jamaicana que es esencia líquida de los latidos del reggae, ska y dance hall.

Orgullosos de sus orígenes, pero también unidos todos ellos, los miembros de las Indias Occidentales que hasta no hace demasiado formaban parte del Reino Unido bailan detrás de grandes camiones con altavoces por mercancía y DJs por polizones. Si te gusta jugar a adivinar la bandera lo pasarás pipa en el Carnaval de Notting Hill. Países con una población inferior al millón de personas que asisten el carnaval tienen su representación en las calles más famosas de este barrio, Portobello Road, Ladbroke Grove, etc. Eso sí, el oro, la plata y el bronce, como si aún estuviésemos hablando de los Juegos Olímpicos, van para Jamaica, Trinidad y Tobago y Granada respectivamente.

Atrás quedaron afortunadamente los tiempos de tragedias en el Carnaval de Notting Hill, tiempos de batallas e incluso de muertes. Quizás gracias al tremendo despliegue policial, a la ayuda inconmensurable de los DJs, que en todo momento dirigen a las masas para que no haya susto alguno, o sencillamente debido al decidido interés de los asistentes por pasarlo bien sin más, en ningún momento me preocupé, ni pasé miedo. El carnaval es tan peligroso como cualquier otra concentración masiva de gente podría ser, o incluso menos.

Y si digo que es una concentración masiva, no tienes más que ver algunas de las fotos del artículo que servidor, embriagado por algo más que el ambiente festivo, encuadró como pudo. Porque el Carnaval de Notting Hill te embriaga hasta con el aroma de su comida caribeña, vendida a precio de oro, eso sí, en puestecitos callejeros a lo largo y ancho del circuito. No te dejes engañar y elige bien aquello que comes, pues las delicias del Caribe están ahí para ser disfrutadas, escondidas entre pollos de negro exterior y sangrante corazón.

El primer día del carnaval es el día de los niños, pero os advierto que de cándido y tranquilo no tiene mucho. Muy pocas familias veo llevando a sus hijos a sabiendas de lo que acontece en el carnaval, muy pocas familias europeas quiero decir. ¿Será que somos más sensatos o sencillamente estamos más reprimidos?

Lo cierto es que los bailes que se ven a lo largo de las 48 horas de carnaval podrían ser calificados como sexo en muchísimos países y las posturas que se ven a lo largo del recorrido son tan sensuales como inverosímiles.

El segundo día, lunes festivo en Inglaterra como ya te comentaba, es el grande de fiesta. Si puedes evitar tener que trabajar o que viajar, el día después mejor que mejor, porque las agujetas y la resaca están garantizadas.

La mejor forma de llegar al Carnaval de Notting Hill es seguramente andando, pues las estaciones de metro cercanas, o no funcionan o están más masificadas si cabe que la propia festividad. No hace falta que lleves nada de valor más allá del dinero que creas que vas a gastar en comida y bebida, al fin y al cabo la mejor forma de evitar a los carteristas es no llevar cartera.

No hacen falta más motivos que los que ya conoces para viajar a Londres cualquier día del año, pero si quieres visitar Londres a la vez que te sumerges en la interpretación caribeña del carnaval de Rio de Janeiro tienes una cita el último lunes de agosto. ¿Nos veremos allí?